En los proyectos arquitectónicos de vanguardia se ha primado con demasiada frecuencia el uso del hormigón frente a los tradicionales ladrillos.
Los ladrillos son económicos, su materia prima se puede encontrar en cualquier lugar del mundo y son mucho más respetuosos con el medio ambiente que otros materiales ampliamente utilizados.
El estudio japonés de arquitectura Tekuto ha querido reivindicar con este proyecto la utilización del ladrillo como material sostenible.
Dadas las especiales características sísmicas de Japón tuvieron que desarrollar un ladrillo más resistente que los tradicionales y que respondiera a toda la exigente normativa japonesa de edificación.
Para ello utilizaron óxido de magnesio añadido a la arcilla. Este óxido se puede encontrar en casi cualquier lugar y no es un elemento tóxico.
Con esta casa, en la que se han utilizado 2.600 ladrillos, se quiere demostrar la viabilidad del producto como material ecológico, económico; y también muy resistente en la construcción.
Via: tekuto.com
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